“Acercarse a la hipnosis desde un punto de vista interaccional
pone el énfasis en el hecho de ser un comunicador eficaz”
Dr. Michael D. Yapko
En un intento de simplificar lo que es la hipnosis y quitando todas las capas que se le han puesto adornándola de esoterismos, creencias, mitos y las más diversas leyendas, nos quedamos con un proceso de comunicación entre dos o más personas que es tan efectivo que es capaz de cambiar la realidad del otro, influirle y persuadirle desde el mismísimo núcleo de su mente, desde su inconsciente, allí donde sus creencias se asientan , donde se guardan sus aprendizajes, donde se olvidan sus ricos y útiles recursos.
Este proceso de cambiar la realidad del otro, pretendo que se entienda desde un punto de vista ético, priorizando las necesidades del interlocutor y con el objetivo de mejorar su situación presente, aportándole recursos que en muchas ocasiones ya estaban en el propio inconsciente y no hay más que “despertarlos” y hacer que su mente inconsciente los ponga a trabajar para su propio bien.
La hipnosis, tal y como indica el Dr. Yapko, una de las figuras más importantes de la hipnosis Clínica, se impone dentro de lo que podemos llamar la comunicación y la influencia interpersonal.
Pero, ¿Por qué utilizar la hipnosis como forma de comunicarte de forma efectiva para influir en los demás?
Nuestro inconsciente es la parte de nuestra mente que almacena nuestros aprendizajes y experiencias, que nos permite crecer, adaptarnos, aprender y cambiar.
Está demostrado científicamente que cualquier cambio se produce primero a nivel inconsciente. Por lo tanto, si queremos cambiar algo, debemos hacerlo desde el inconsciente.
¿Cómo producimos un cambio? Un cambio de produce cuando nuestro inconsciente adquiere un nuevo aprendizaje que sustituye a uno antiguo que no funcionaba o que incluso era perjudicial. Ese nuevo aprendizaje es una nueva manera de ver la realidad, es tener otro punto de vista, es dar luz a esa zona de la realidad que ni siquiera sabiamos que estaba ahí y que está llena de nuevas posibilidades y oportunidades que de otra forma jamás hubiésemos tenido en consideración.
Cuando influimos en alguien estamos cambiando parte de su realidad desde su propio inconsciente; si no lo hacemos de este modo, las posibilidades de lograrlo son prácticamente nulas.
Esta comunicación directa con el inconsciente es lo que logramos a travésde la hipnosis, ya sea una hipnosis formal en un contexto terapéuticoo aprovechar las herramientas que nos da el proceso hipnótico para producir una comunicación a varios niveles durante una conversación normal, lo que nos llevaría a ese campo de la influencia y la persuasión.
¿Te gustaría tener el control de aquello que comunicas y producir cambios sorprendentes en las personas que te rodean?